Risotto de Alcachofas y Calabacín
Vale, esta receta lleva queso, lo sé. Sin embargo es una versión mucho más saludable que otros risottos. En esta receta, conseguimos que el arroz salga meloso gracias al caldo, no al queso. Por lo tanto, con añadir un poquito de queso al final damos sabor, pero no añadimos tanta grasa.
Además es una forma muy buena de comer verduras, ya que quedan muy bien mezcladas con el arroz, especialmente si lo cortamos en trozos muy pequeños. ¡Aunque he de reconocer que a mí me gustan los tropezones de alcachofa! 😁
Ingredientes:
- Arroz blanco
- 3 alcachofas frescas (o 1 bote de corazones de alcachofa en conserva)
- 1 cebolla
- 1/2 calabacín
- Caldo de pollo o verduras
- 1/2 vaso de vino blanco (opcional)
- 50g. Parmesano rallado
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta
Preparación:
Lo primero que tendremos que hacer será calcular la cantidad de caldo que vayamos a necesitar, en función de la cantidad de arroz. Yo suelo calcular medio vaso de arroz por persona, y el triple de caldo que arroz. Puede que nos sobre un poco, pero es mejor tenerlo preparado para no quedarnos cortos.
En una olla pondremos el caldo a calentar y tendremos un cucharón a mano para ir echando el caldo al risotto. Queremos que el caldo esté prácticamente hirviendo cuando lo echemos al risotto.
Cortamos todas las verduras en trozos pequeños y salteamos en una olla grande caliente con aceite. Las cocinaremos a fuego medio hasta que estén tiernas, aproximadamente 5 minutos.
Cuando las verduras ya estén tiernas, añadiremos el vino blanco y subiremos el fuego. Dejamos que evapore el alcohol durante unos 2-3 minutos.
En este momento volvemos a bajar a fuego medio y añadimos el arroz. Removemos durante 1 minuto para que se empape del aceite.
Posteriormente echamos un cazo de caldo y removemos hasta que todo el caldo haya sido absorbido por el arroz. Iremos repitiendo esta operación hasta que el arroz quede tierno y meloso. Esto tardará unos 15 minutos. Ve probando el punto del arroz hasta que consideres que está listo.
Apaga el fuego y en el último momento echa el queso parmesano y remueve hasta que se haya derretido y mezclado por completo.
Sirve inmediatamente y echa un poquito más de parmesano rallado por encima para decorar. ¡Que lo disfrutéis!